Una vez más el gobierno federal en contubernio con las Cámaras aprobaron un aumento a la gasolina y aunque supone que se arrancara en enero del año que entra, el solo anuncio ya empezó con lo aumentos.
Al subir la gasolina se lleva todo a las nubes, pero lo más importante es que estos ajustes son necesarios, precisamente porque no hay de donde echar mano para las necesidades del presupuesto federal.
Sin embargo una propuesta sería bajar los altos sueldos de los funcionarios federales, de los senadores, de los diputados y en general atacar la corrupción que se encuentra en todos lados.
De los escándalos como los de Bejarano, Ponce, Cajigas, Elba Esther, Hank Rohn y los ministros de la Suprema Corte, nomás en eso queda: en periodicazos y escándalos morbosos, pero nada judicialmente en concreto. Es decir, hacen y deshacen con nuestros impuestos, pero no pasa nada, fuera de una leve quemada, no pasa nada... ya ven a Napito... y ejemplos sobran.
A nivel municipal es la misma cosa. Existen cacicazgos que no quieren caer, aunque haya periodicazos y miles de llamadas a los medios de comunicación. El asunto es que en verdad se pueda hacer una transformación para sanear desde las raíces la cuestión de todos aquellos que viven de fregar a los demás, ya sea de manera directo o mediante las finanzas públicas. Ejemplos en el transporte, en el deporte, en los medios de comunicación, en la docencia, con abogados y cuanta gente te encuentres campantemente caminando por la Serdán y que aprovecha la falta de leyes que realmente se quieran aplicar y que no tengan esos “vacíos” en los cuales se escudan.
Al subir la gasolina se lleva todo a las nubes, pero lo más importante es que estos ajustes son necesarios, precisamente porque no hay de donde echar mano para las necesidades del presupuesto federal.
Sin embargo una propuesta sería bajar los altos sueldos de los funcionarios federales, de los senadores, de los diputados y en general atacar la corrupción que se encuentra en todos lados.
De los escándalos como los de Bejarano, Ponce, Cajigas, Elba Esther, Hank Rohn y los ministros de la Suprema Corte, nomás en eso queda: en periodicazos y escándalos morbosos, pero nada judicialmente en concreto. Es decir, hacen y deshacen con nuestros impuestos, pero no pasa nada, fuera de una leve quemada, no pasa nada... ya ven a Napito... y ejemplos sobran.
A nivel municipal es la misma cosa. Existen cacicazgos que no quieren caer, aunque haya periodicazos y miles de llamadas a los medios de comunicación. El asunto es que en verdad se pueda hacer una transformación para sanear desde las raíces la cuestión de todos aquellos que viven de fregar a los demás, ya sea de manera directo o mediante las finanzas públicas. Ejemplos en el transporte, en el deporte, en los medios de comunicación, en la docencia, con abogados y cuanta gente te encuentres campantemente caminando por la Serdán y que aprovecha la falta de leyes que realmente se quieran aplicar y que no tengan esos “vacíos” en los cuales se escudan.
